El incendio de Gran Canaria avanza sin control y obliga a evacuar a 9.000 personas
El fuego ha calcinado más de 6.000 hectáreas y las llamas han llegado a superar los 50 metros de altura
El incendio de la cumbre de Gran Canaria, iniciado el pasado sábado 17 de agosto en el municipio de Valleseco, afecta ya a un perímetro de más de 60 kilómetros, en el que se han quemado más de 6.000 hectáreas y que ha obligado a desalojar a unas 9.000 personas de más de 50 núcleos de población de ocho municipios de la isla.
No se descartan nuevas evacuaciones en caso de que las llamas avancen hacia Mogán, pero se ha podido contener el fuego y tampoco se espera que los vecinos sean desalojados y los desalojados, puedan volver a sus casas en las próximas horas.
El fuego sigue descontrolado y los esfuerzos de los servicios de extinción se concentran a estas horas en el flanco derecho del incendio, que afecta al Parque Natural de Tamadaba.
No obstante, el fuego ha arrasado la fauna y la flora del importante reserva de la biosfera, El Parque Natural de Tamadaba.
Las temperaturas están bajando, lo que nos hace sentirnos optimistas, pero sin embargo, hasta que no se apague hasta el último rescoldo, no se dejará que los habitantes del Valle de Agaete, vuelvan a sus casas.
El operativo de extinción que trabaja en estos momentos en las cumbres de Gran Canaria es el mayor de los desplegados en la historia del archipiélago. Así lo ha señalado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas quien se ha desplazado a la isla para seguir el incendio. En este sentido, Planas adelantó que este martes se sumarán cuatro aeronaves a las 16 que ya están trabajando en la zona, cuatro de ellas hidroaviones procedentes de la Península. "El despliegue de medios para sofocar este incendio es de los más importantes realizados en los últimos años tanto en Canarias como en España y que la prioridad es evitar pérdidas de vidas humanas, así como minimizar los daños materiales y humanos", recalcó Luis Planas.
Del mismo modo, el ministro Planas ha reconocido que estamos en "un momento crítico" en la lucha contra "este gravísimo incendio" y ha destacado el apoyo que el Estado está prestando a Canarias para la extinción del fuego y ha insistido en que la prioridad es evitar la pérdida de vidas humanas. Durante la noche, el avance del fuego ha obligado a evacuar nuevas poblaciones, entre ellas el casco urbano completo de Valleseco (ayuntamiento con 3.784 habitantes), el barrio de El Carrizal de Tejeda, en la cumbre; y los barrios de El Valle y El Risco, en Agaete, cerca de la cabeza del incendio, en el noroeste de la isla. Las últimas poblaciones desalojadas han sido Saucillo, en Gáldar, y Piletas y Troya, en Agaete.
El incendio ha provocado ya un enorme daño ambiental, con varios espacios naturales afectados, entre ellos una de las grandes joyas verdes de la isla, el parque natural de Tamadaba. No hay constancia de que se hayan producido desgracias personales a pesar de que en algunas zonas se ha adentrado en espacios que los técnicos llaman de "interfaz", porque en ellos se mezclan vegetación y viviendas. En los trabajos para atajar el fuego hay unas 600 personas, que sumadas a las aproximadamente 400 que lo hacen durante la noche, alcanzan las más de 1.000 personas diarias que luchan en la extinción del incendio.
Los esfuerzos se concentran sobre todo en contener el avance hacia Agaete y La Aldea, el frente más complicado, así como hacia Tejeda, donde el fuego se mantiene activo a pesar de los esfuerzos, ha indicado el jefe de servicio de la Dirección General de Seguridad del Gobierno canario, Florencio López. En la zona de Agaete y La Aldea, donde se encuentra el Parque Natural de Tamadaba, solo se puede actuar por aire, pues es muy peligroso hacerlo por tierra, ya que hay gran riesgo de que los medios terrestres queden atrapados.
El fuego en las zonas habitadas está contenido gracias al trabajo realizado en las últimas horas, ha dicho López. Afortunadamente, hay zonas del pinar de Tamadaba que no han sido afectadas y "no se está haciendo mucho daño", de manera que el fuego avanza como si fuera una quema controlada, pero todo dependerá de cómo evolucione el viento. Por su parte, el presidente canario ha indicado que en las próximas horas bajarán previsiblemente las temperaturas y subirá la humedad, lo que favorecerá la extinción del fuego.
La cifra de 9.000 desalojados de sus casas se ha calculado a partir del censo oficial de los distintos barrios afectados por las evacuaciones. De ellos, solo 400 personas han pasado la noche en los seis albergues provisionales habilitados en San Mateo, Teror, Gáldar, Moya, Agaete y Tunte, en este último caso en el sur.
Los servicios de socorro también se han mantenido en contacto con las 40 personas a las que anoche se ordenó permanecer confinadas, por su seguridad, en el centro cultural de Artenara, a las que se sacará de allí en cuanto la situación del incendio lo permita. La decisión de que se recluyeran en ese lugar se tomó al considerar que ofrecía un refugio con garantías, porque anoche hubiera sido arriesgado salir de la localidad con las condiciones del incendio.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Hasta aquí llega la crónica oficial sobre el incendio voraz que está afectando al noroeste de la isla de Gran Canaria, una de las 8 islas que conforman el Archipiélago Canario.
Este fuego ha arrasado 1/3 de la superficie forestal de Gran Canaria. Se ha llevado el pulmón de nuestra isla. Gran Canaria agoniza llena de humo que la asfixia y hace que la flora y la fauna se pierda.
Numerosos granjeros se hayan desconsolados porque tuvieron que salir con lo puesto de sus viviendas y dejaron atrás a sus animales. No dejan de preguntar cuándo podrán acercarse a sus viviendas para recoger el ganado, unas cuantas vacas o unas cuantas cabras, para darles agua y comida. Son su medio de vida, pero también les une a ellos algo sentimental, por lo que están acongojados por sus animales.
Otros agricultores ver malograr sus cosechas y se hayan destrozados, porque de ellas depende el pan que poner en sus mesas.
Quiero destacar con un enorme orgullo la solidaridad que hay en mi pueblo canario. Personas que no se conocen de nada, dispuestas a ayudar a otras, dejando sus casas para poder dormir, comer y descansar; otros, que van recogiendo a los animales para llevarlos a un albergue y tenerlos protegidos y alimentados; y por supuesto, el apoyo incondicional a esta causa, sin percatarse de que los intereses sean ajenos o propios, especialmente en estas situaciones tan comprometidas y difíciles,en cuya extinción trabajan casi un millar de personas y 14 aeronaves, Las BRIF (Las Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales) llegadas desde la isla de La Palma; también han sido movilizadas las brigadas forestales del Ministerio de Agricultura, los equipos forestales del Gobierno de Canarias y un avión anfibio.
Estos medios se suman a los terrestres y aéreos que ya están actuando en la extinción de este fuego con dos camiones, todoterrenos y nueve bomberos de Fuerteventura ayudan también en Gran Canaria, numerosas personas anónimas que colaboran desde una taza de café bien caliente a prestarle su camión para llevar suministros a los que están cortando el fuego; por supuesto, se cuenta con Protección Civil que apoyan a las poblaciones que habitan en zonas vulnerables para hacer frente a los desastres naturales o de cualquier otro carácter humanitario; los más de 400 efectivos que durante la noche trabajarán en la extinción del incendio y mientras, al amanecer, se incorporan medios aéreos, terrestres y refuerzos de la Unidad Militar de Emergencia (UME), helicópteros que recogen agua del mar para poder sofocar las llamas, hidroaviones y hasta un drom de última generación, mandado por el Gobierno Central, para controlar el fuego durante la noche, cuando los efectivos no pueden acercarse a él y les irá indicando la direccionalidad, la intensidad y el calibre de sus llamas.
Yo sé que es muy poco lo que estoy haciendo y que seguro me dejo a muchísima gente que está dejándose el "lomo" y algo más en la extinción de este magno incendio y por ello, pido disculpas. Pero aún así, quisiera manifestar mi enorme pesar y el disgusto tan grande que estoy sufriendo por ver cómo parte de la gran belleza de ésta, mi Gran Isla, se va al garete y tendré que esperar años para poder ver esa arboleda de Pinos Canarios que son autóctonos de las islas y toda la fauna y la flora que se ha perdido, tal vez, algunas para siempre, al ser endémicas de esta isla.
Espero que los pequeños de hoy, logren ver y disfrutar lo que yo vi en ese Pinar de Tamadaba. Y que éste, consiga reverdecer y que sus pinos crezcan hacia el cielo para que las nubes se sientan arrulladas con el hermoso manto de nubes que cubre los montes de mi isla.
Manto de nubes en el Pinar de Tamadaba y con el Pico Teide, con sus 3.715m, como guardián de la foresta
¡Hasta pronto, cómplice!
4 comentarios:
Lo mas triste, aparte de la desgracia, es ver lo "mucho" que le preocupa al gobierno lo que pasa. Y a sus acólitos.
Ayer me enteré de lo que pasaba por que vi una publicación donde se comparaba las portadas de lo periódicos el dia que se quemó Notre Dame, con las actuales y es vergonzoso que a nadie parece importarle.
Un abrazo, cómplice y amiga!
Y mis deseos de que todo se apague lo antes posible.
Tengo que darte la razón mi estimada amiga. Hoy, día 22 después de 6 de haberse iniciado el fuego, ha aparecido nuestro presidente en funciones, el señor Pedro Sánchez y yo me pregunto para qué. Supongo que para hacerse la foto y hacernos creer la preocupación por este lamentable suceso. Claro que antes no pudo venir porque estaba de vacaciones y por supuesto, no podía dejarlas por un incendio en una isla, que le queda lejos.
Lo curioso es que ha llegado a creer que los canarios nos chupamos los dedos ante su visita y por consiguiente, el señor Sánchez cree que los canarios somos ignorantes y no nos quedamos con la movida.
En fin Eulalia, lo terrible de este asunto es la catástrofe que ha supuesto a biodiversidad de nuestra isla y también, al sentimiento de pena y dolor en toda la población de la isla. ¿Sabes que la superficie quemada es comparable con toda Barcelona o con la provincia de Valencia? Tremendo, ¿verdad?
Dejando todo esto aparte, me alegra que estés mejor.
¡Hasta pronto, cómplice!
Marta Montero
Todo esto es una gran desgracia, pobre gente, pobre fauna, pobre planeta, ojalá que todo cambie para el bien de todos, saludos
En verdad tienes toda la razón José Luis: es una verdadera desgracia para la naturaleza, para los hombres, mujeres y niños que viven en mi isla y por supuesto, para la isla en sí.
Tardarán años para que vuelva hacer la de antes, aunque jamás para los ojos de esta generación de grancanari@s será la que era.
Gracias por tu comentario y tu valoración de esta catástrofe.
Saludos,
Marta Montero
Publicar un comentario